En la imagen, varios dibujos de entidades que me han realizado algunos testigos cuyos casos he estudiado de primera mano.
Desde que hace más de treinta años centré
mi atención en el estudio de las entidades,
debido a mis investigaciones en torno a los encuentros con ufonautas, los visitantes de
dormitorio, las apariciones marianas,
las visiones místicas y las manifestaciones de fantasmas, he ido observando el
papel tan crucial que juega la mente humana en todas estas historias. En tales
casos, el sujeto siempre se halla bajo un estado
alterado de conciencia (EAC). Durante el éxtasis místico, el trance
mediúmnico, la parálisis del sueño, la abducción o la canalización, el
individuo no está en plena vigilia, sino que está experimentando un EAC. Y es
ahí donde tiene lugar el 'contacto' con otra realidad, plano o dimensión
(transpersonal o parafísica). No podemos desechar estas visiones de entidades como meras alucinaciones. Son
mucho más complejas de lo que aparentan ser. Y, además, el protagonista suele
vivir otra serie de episodios anómalos a lo largo de su vida (ESP, viajes
astrales, poltergeist...) No son
incidentes aislados. Asimismo, en los casos que he examinado, lo mismo que en
los casos estudiados por otros colegas, observamos que dichas visiones de entidades provocan un gran impacto
emocional en el protagonista. Su vida no vuelve a ser la misma. Se produce un
efecto transformador a nivel interno. Desde la paraufología, intentamos profundizar precisamente en los aspectos
psíquicos, oníricos y paranormales de estos episodios, para saber qué ocurre en
la mente del testigo durante esos instantes. ¿Estamos, como sostenían los
investigadores Hilary Evans y Scott Rogo en los años 80, ante un agente externo o interdimensional que influye en lo más profundo de la psique del
sujeto? ¿Acaso ante "actores cósmicos
ataviados de antifaz", como me aseguraba el ufólogo sevillano Ignacio Darnaude? ¿Es, quizá, nuestra
mente un 'canal', 'túnel' o 'pasadizo' a través del cual interactuamos con
'inteligencias' que, de algún modo, nos manipulan y nos hacen ver o creer determinadas
cosas, como vengo sosteniendo desde siempre? ¿Qué sentido tiene eso que
denomino 'mimetización transitoria' en la interacción entre los humanos y esas entidades? En la medida de mis
posibilidades, trato de ofrecer respuestas a estos interrogantes en mi libro OVNIS. Del espacio exterior al espacio
interior y en algunos recientes artículos que he publicado en revistas
especializadas (como Ovnis que manipulan
nuestro cerebro, en Año Cero de
julio 2017; y Ovnis y la mimetización
transitoria, en Más Allá de
septiembre 2018). Pienso que la clave a este fascinante y complejo enigma no
está ahí fuera, sino dentro de nosotros mismos. Y es que estudiando nuestras
capacidades internas, los EAC, así como determinadas características
psicoemocionales y parapsicológicas de los testigos, podremos llegar algún día
a descubrir qué encierran de verdad estos encuentros con entidades y, sobre todo, descubrir sus verdaderas intenciones.
(Por Moisés)